¿Cómo se conducen los coches eléctricos? Diferencias con los tradicionales

En la actualidad el crecimiento del mercado y el incremento en la demanda de los coches eléctricos es crucial saber cómo funcionan. Muchos usuarios que conducen los coches eléctricos, se pueden dar cuenta de que no es igual que conducir un coche de combustión.

Sin embargo, existen algunas diferencias para conducir un coche eléctrico que debes conocer antes de que puedas iniciar tu cambio hacia la electrificación.

Los coches eléctricos no tienen diferentes marchas

La caja de cambios es algo que vamos a dejar atrás con los coches eléctricos para siempre, porque estos coches tienen una sola marcha. Esto hace que la transición sea muy simple, porque únicamente tienes que poner la palanca en la posición “D”, y el coche estará listo para arrancar.

Si no has sido de coches automáticos, es probable que al principio te cueste un poco adaptarte. Sin embargo, una vez que lo pruebes sentirás una gran comodidad, porque ya no tendrás que volver a cambiar las marchas, sino que únicamente tendrás que preocuparte por acelerar.

Diferentes modos de conducción

La gran mayoría de los modelos de coches eléctricos que encontramos en el mercado suelen tener diferentes modos de funcionamiento. Los más comunes son: ECO, Normal y Sport, los cuales cada uno tiene una potencia determinada, así como un ritmo diferente.

También se ajustará la intensidad de la frenada regenerativa, así como parámetros en la dirección y la suspensión. Esto hace que puedas aprovechar al máximo el rendimiento de tu coche, y que puedas personalizar fácilmente la experiencia de conducción.

Sistema con un solo pedal

En la mayoría de los coches eléctricos el sistema One Pedal, o de un pedal es el más utilizado. En estos sistemas, podrás conducir pisando únicamente un pedal, siendo un mecanismo que ejerce la frenada conforme se va levantando el pie del acelerador, haciendo que sea casi innecesario pisar el freno.

Otro de los sistemas mecánicos y con una gran innovación es el freno regenerativo que incorporan los coches eléctricos. En estos casos, la energía residual que libera el coche al frenar se reutiliza, con la finalidad de que se pueda almacenar y al mismo tiempo se recarga la batería.

Estos dos sistemas hacen que los componentes del coche tengan una mayor durabilidad, por lo que a largo plazo se puede tener un ahorro en el uso de tu coche. Además, con el sistema de frenada regenerativa, la batería de tu coche eléctrico tendrá una mayor durabilidad.

La autonomía es uno de los inconvenientes de los coches eléctricos

Cada día vemos que los coches eléctricos tienen una mayor autonomía, pero la verdad es que esta autonomía sigue siendo limitada frente a los modelos de conducción. Para los desplazamientos largos, siempre se debe estar monitoreando la batería del coche para evitar que te vayas a quedar tirado.

Por este motivo, debes planificar la ruta para que puedas cargar tu coche en las estaciones de recarga y así tener suficiente carga para llegar a tu destino. Además, si vas a hacer trayectos largos, siempre será mejor utilizar el modo de conducción ECO.

Gracias a este modo, se puede aprovechar mejor la energía de tu vehículo, y podrás tener la máxima autonomía posible de cada carga. Sin embargo, los coches eléctricos están pensados especialmente para las ciudades, siendo más ineficientes cuando los utilizamos para realizar trayectos largos.

Un motor silencioso y un arranque veloz

En los coches de combustión siempre escuchamos el motor del coche, y cuando se realiza el cambio a un coche eléctrico esto es lo primero que podremos notar. Estos coches no tienen ningún tipo de ruidos de arranque, porque el sonido que tienen es muy suave.

Esto permite que el coche sea de suave conducción, evitando las vibraciones que un conductor puede sentir cuando se utiliza un coche de combustión.

Por otra parte, el arranque será diferente en un coche eléctrico, porque el inicio de marcha será más rápido y tendrás una mayor aceleración que en los coches de combustión. Esto especialmente si conduces en modo Sport, por lo que es un cambio considerable frente a los coches de combustión.

Las diferencias de los coches eléctricos pueden ser considerables, sin embargo, estos coches nos ofrecen una conducción muy cómoda y es por ello que cada vez más personas optan por este tipo de vehículos.